Ok, tranquilos. No estamos intentando que esto sea un trabalenguas desde el título, pero es que todos se pueden confundir.
Email delivery VS email deliverability
De entrada, el argot anglosajón antojan a una comprensión lenta, pero la realidad es que estos dos son parte de los conceptos más sencillos de comprender de todo lo relacionado con el email marketing.
Email delivery
En principio, veamos al email delivery. Concretamente, es la referencia de la capacidad de un usuario de aceptar tu mail, es decir, cómo un receptor acepta el mensaje que tú has enviado; termina siendo el «paso previo» a que el mensaje de correo electrónico sea clasificado como SPAM o no.
[tweetthis twitter_handles=»@mittum»]El #email delivery define la capacidad de un usuario de aceptar un correo electrónico[/tweetthis]
En el factor delivery se juegan muchos puntos, desde si existe o no la dirección de email a la cual se quiere entregar el correo, la evaluación de IPs bloqueadas o dadas de baja, entre otros; la suma de los factores es, al final, la que determina si hay o no «delivery».
Email deliverability
Por otro lado, el email deliverability es un concepto que no hace exactamente referencia a la capacidad de que el email llegue a un usuario o no, sino que más bien nos indica en dónde termina.
[tweetthis twitter_handles=»@mittum»]El #email deliverability define el «destino» que tendrá tu #email dentro de la bandeja de un usuario[/tweetthis]
Al email deliverability también se le conoce como «inbox placement». Se trata, a grandes rasgos, del destino que tendrá el email una vez que llegue a una determinada bandeja, la cual puede ser plenamente la de entrada o, en el peor casos, la de SPAM.
De hecho, son principalmente 3 factores los que determinan el email deliverability:
- Primero, el contenido; es decir, si es relevante o no para el receptor del email lo que contiene el correo
- La reputación; factor que es valorado, principalmente, mediante el Internet Service Provider del que envía el correo
- Y por último, está la identificación – que es un cálculo entre protocolos que se dan entre el contenido y la reputación.
¿Conclusiones?
Y bien, ¿Comprendiste las diferencias y similitudes? La realidad es que sin el «email delivery» no puede existir el «email deliverability», y viceversa. Ninguno puede existir sin la presencia del otro.
Esperamos este artículo te haya sido de ayuda para comprender la diferencia entre email delivery y email deliverability. Compártenos tus dudas o simplemente algún comentario.
Imagen: ShutterStock