Los millennials (también conocidos como la Generación Y) son los nacidos entre la década de los 80 hasta los comienzos de la década de los 2000 (aunque aún hay cierta controversia sobre estos datos).

El ADN del millennial

El millennial tiene una amplia orientación hacía la conexión global, una mayor consciencia de los valores y, sobre todo, un constante uso de las tecnologías, el internet y sus medios derivados, en los que se incluyen las redes sociales.

Poco a poco, los millennials tendrán una capacidad adquisitiva mucho mayor, y ante ese hecho las estrategias de marketing deben afinarse lo suficiente para poder llamar la atención de este grupo; por supuesto, el mailing no está excluido.

Una idea errónea es pensar que los millennials sólo usan Snapchat o Instagram, por poner un ejemplo. La realidad es que son asiduos usuarios del mail, por lo que el mailing para millennials se antoja como una práctica potencialmente efectiva.

Algunas grandes firmas ayudan a respaldar esta declaración. Por ejemplo, Nielsen destaca que el 85% de los millennials estadounidenses disponen de un smartphone, por lo que son -de alguna manera- un blanco asequible.

Lo más importante en el mailing para millennials

La esencia está en el mensaje que se le hace llegar, puesto que los millennials tienen una amplia orientación hacía la conexión global, una mayor consciencia de los valores y, sobre todo, un constante uso de las tecnologías, el internet y sus medios derivados, en los que se incluyen las redes sociales.

Ahora, contrario a muchas de las leyes en el marketing, en el mailing para millennials no debes segmentar (o mejor dicho, hay que hacerlo de modo diferente). Sí, si hay algo que caracteriza a este grupo es que la segmentación tradicional de edad y sexo no les sirve, sino más bien que hay que basarse en segmentación por gustos y grupos sociales.

[tweetthis twitter_handles=»@mittum»]En el #mailing para #millennials, la segmentación debe realizarse por gustos y grupos sociales, y no por edad y género[/tweetthis]

Por último, es casi obvio (pero no nos gusta obviar) que dentro de ese ‘proceso de entendimiento’, otro punto primordial es la adaptación del lenguaje al argot o jerga de los jóvenes. Es justamente en el marketing por correo electrónico dirigido a estos grupos que se permite ser hasta cierto punto ‘libre de ataduras’ o de conceptos institucionales, e incluir en un asunto de correo electrónico incluso frases reconocidas en memes, o los clásicos “LOL”, “WTF” y “YoLo”, sólo por poner un ejemplo. Pero claro, se vuelve al mismo punto: se deben conocer sus gustos, preferencias y lenguaje propio de cada uno de sus grupos sociales.

 

¿Qué otros puntos consideras importantes en el mailing para millennials? Comparte tu opinión, que siempre es bienvenida.

Imagen: ShutterStock