Podemos afirmar que tanto los correos electrónicos como los mensajes de texto SMS son dos canales más que adecuados para aumentar el número de clientes de una marca. Dicho en otras palabras, ambas técnicas se definen como elementos confiables para establecer canales de comunicación con nuestros clientes que vayan a generar una repercusión e impacto positivo para nuestra marca.
El caso es que, a pesar de que ambas son excelentes técnicas, es cierto que existen diferencias entre ellas que se deben conocer antes de realizar cualquier acción estratégica de negocio. Por tanto, en nuestro artículo de hoy queremos compartir contigo qué puede cada una de estas herramientas aportar a tu empresa, así como las ventajas particulares de cada una y las similitudes entre ambas.
Pero… No perdamos las buenas costumbres: lo primero es lo primero, y antes de nada queremos definir exactamente de qué se trata cada técnica.
¿Qué es el Email Marketing?
Estamos hartos de hablarte de lo positivo que es el Email Marketing como canal de comunicación y promoción para tu empresa. Y, en esta ocasión, lo haremos una vez más. Porque el Email Marketing es un canal directo entre marca y usuario, que permite adaptar el contenido ad hoc a cada consumidor, y conseguir -así- un mayor retorno de inversión. Es una técnica directa, pero nada intrusiva, ya que es el propio usuario quien acepta de antemano el recibir dicha información en su bandeja de entrada.
¿Cuáles son sus principales ventajas?
- Se trata de una canal directo de información y comunicación
- Logra reforzar la imagen de marca de la empresa
- Permite promocionar y vender productos y servicios de manera más directa
- Logra fidelizar a usuarios (siempre y cuando les ofrezcamos un contenido de calidad)
- Ofrece amplias posibilidades para analizar y medir estadísticas
- Permite ahorrar dinero y recursos (al ser económica y poderse automatizar fácilmente)
¿Qué es el SMS Marketing?
Por su lado, el SMS Marketing puede definirse como el envío de mensajes de texto o SMS de manera masiva, para comunicar ofertas, actualizaciones, promociones, alertas, etc. a aquellas personas que -al igual que en el Email Marketing- han aceptado de antemano recibir comunicaciones por parte de la marca, por lo que tampoco puede considerarse una técnica intrusiva.
Al reflejarse directamente en la pantalla del móvil del usuario, y teniendo en cuenta que -hoy en día- no hay ni una solo usuario que salga de su casa sin su terminal, ni que esté más de 20 minutos sin echar un vistazo a su pantalla, podemos entender que el SMS Marketing tenga el éxito que tiene.
¿Cuáles son sus principales ventajas?
- Se trata de una técnica económica
- Permite personalizar los envíos
- Es una canal directa, y su uso no está tan masificado como el del Email Marketing
- Tiene un alto ratio de apertura
- Permite analizar estadísticas como aperturas, entregados, pendientes y no entregados.
Principales diferencias entre el Email Marketing y el SMS Marketing
Analizando todos los datos anteriores, podemos concluir que, entre el Email Marketing y el SMS Marketing existen muchas similitudes (como que ambas permiten personalizar los contenidos y se convierten en técnicas realmente económicas en comparación con otras de su mismo entorno), no obstante, si bien es cierto que también podemos hablar de algunas diferencias:
- Por un lado, una de las grandes diferencias entre ambas es la tasa de apertura, ya que mientras que el SMS logra unos porcentajes y ratios de apertura que rondan el 90%, el Email lo logra de manera inferior.
- Pero, por otro lado, la posibilidad de estudio de estadísticas es mucho más amplia en el Email antes que en SMS, dada la naturaleza de la herramienta.
- Y, por su parte, a pesar de que ambas son técnicas económicas, el SMS Marketing supera ligeramente al Email en cuestión de coste.
En cualquier caso, si desde Mittum tuviésemos que recomendarte una herramienta, sin duda… no lo haríamos :). ¿Sabes por qué? ¡Porque ambas técnicas pueden combinarse! De hecho, es lo que debes hacer. Una presenta unas ventajas, y la otra otras. Por tanto, ¿por qué tendrías que elegir?
¡Suerte y a por todas!
