El Email Marketing es, posiblemente, una de las herramientas más potentes para iniciar una comunicación directa con nuestros clientes.
Si bien es cierto, se trata de una técnica que lleva muchos años presente en nuestro día a día, pero –no obstante– (y como, sabiamente, dicen las abuelas): “¿Por qué vamos a cambiar algo que funciona correctamente?”
Y, es que, la fórmula del Email Marketing continúa funcionando de manera más que correcta, a la vez que es efectiva y adaptable a cada objetivo y requisito de marca.
Ahora bien, si tuviésemos que resumir en tres grandes ideas base los elementos cruciales del Email Marketing, éstos serían:
1.- Definición de una estrategia adecuada y ad hoc a nuestros objetivos de marca
2.- Selección de la herramienta idónea de gestión de campañas ad hoc a tu marca
3.- Inversión en tiempo y recursos en cuanto a los diseños y contenidos que vamos a compartir con nuestra comunidad: ¡son clave!
Bien, para los dos primeros puntos, desde Mittum ya nos hemos encargado previamente de crear algunos artículos que den solución y detallen estas cuestiones en profundidad, para que no tengas ninguna duda al respecto. Haz clic encima de cada punto, y te lo volveremos a repetir encantados.
Pero, particularmente para el tercer punto (del seguramente ya te hemos hablado en algunas de nuestras líneas de otros artículos), vamos a proceder a detallar, hoy, mucho más específicamente.
¿Cómo crear la newsletter adecuada? Dedicando tiempo y recursos
1.- Titulares
Si hay algo que tenemos claro es que el titular de una newsletter, para que tenga el éxito suficiente como para generar un retorno, ha de disponer de las siguientes 3 características:
- Debe generar interés: debemos lograr que el usuario, a simple vista, quiera abrir el mensaje, porque lo que ha leído en el preheader o en los titulares es lo suficientemente atractivo como para llamar su atención.
- Debe disponer de un tono cercano y directo: el usuario debe sentir, al leerlo, que te estás dirigiendo a alguien que forma parte de tu comunidad, de tu familia digital; que no se trata de un número más que alimenta tu base de datos.
- Debe ofrecer valor: debes buscar diferenciarte de la competencia de alguna manera; que tu titular no sea uno más, uno convencional. Sino que ofrezca una promesa, algo diferente que enganche al usuario y le aporte valor, y que le haga entrar en el embudo de conversión.
2.- Contenido
Aunque, evidentemente, el contenido que coloques en tu newsletter es totalmente libre, y tú mismo sabes mejor que nadie qué debe contener, pero en cualquier caso, sí que es cierto que existen una serie de recomendaciones que te aconsejamos tener en cuenta.
Sobre todo, para lograr la fluidez en la lectura y que el usuario llegue al final de contenido (donde, dicho sea de paso, generalmente se encuentra el CTA)
3.- Llamadas a la acción (Call To Action: CTA)
- En primer lugar, es necesario que la atmósfera gráfica de tu newsletter siga la misma estética que tu marca, para que el usuario pueda fácilmente identificar ante qué y quién se encuentra.
- Utiliza subtítulos para dividir la información: este consejo es sumamente útil, sobre todo porque (como decíamos líneas arriba) ayuda mucho a la fluidez de lectura del usuario. Evidentemente, cuando enviamos una newsletter o boletín a un usuario es, normalmente, porque queremos que realice una determinada acción que beneficiará a nuestra marca, por lo que debemos hacerle las cosas lo más fáciles que podamos. Y la fluidez de lectura es clave. Intenta que solamente leyendo los titulares ya pueda entender de qué se trata lo que vienes a contarle.
- Emplea más recursos visuales que textos: los vídeos, los GIFs, las imágenes y los emojis funcionan a las mil maravillas en el Email Marketing. Porque, como dice el conocido refranero español, una imagen vale más que mil palabras. Y generalmente el usuario confía más en una imagen o vídeo del producto o servicio que de un párrafo en el que, evidentemente, estás tratando de venderle algo, pero no sabe qué es ni qué aspecto tiene.
- Llamadas a la acción (Call To Action: CTA)
Las llamadas a la acción, como bien ya sabes, son botones en los que el usuario puede hacer clic, y le enviarán a otra página donde poder realizar una determinada acción.
Los CTA pueden ser múltiples y muy variados: podemos encontrarnos con botones tan simples y comunes como los que buscar culminar una venta, o con otros menos conocidos como son los de compartir cualquier tipo de acción o contenido en redes sociales (clicando en el botón, podrás automáticamente compartir un contenido de marca en tus redes) o descargarse un archivo, ebook, estudio, etc.
Sea cual fuere el objetivo que persigue tu botón de llamada a la acción, hay una serie de puntos que has de tener muy claros:
- Ha de ser sumamente llamativo: es decir, el usuario tiene que poder identificar el CTA a golpe de vista. La clave es que logres que, sin ni siquiera leer el contenido, cualquier usuario sepa identificar el CTA y qué es lo que éste busca.
- ¡Cuidado con los colores!: ¡Nada de rojos! Digamos que el color rojo, en los CTA, está totalmente prohibido, porque no es un color visualmente atractivo para el ojo humano, es decir, el usuario no va a identificarlo (ni al mensaje) como podría hacerlo con otros colores como el azul o el verde.
- La palabra que emplees en el botón ha de ser clave y directa: no te andes con rodeos ni intentes confundir a tu usuario. Si lo que buscas con tu newsletter es que el usuario realice una compra, sé claro: “Haz clic aquí para hacerte con ello”. Si, por el contrario, lo que buscas es que el usuario comparta un contenido en redes, “haz clic aquí para compartir en Facebook”. Solamente de esta manera, el usuario confiará en que lo que le estás diciendo, es, efectivamente, lo que hay. Sino, con el tiempo solo conseguirás que desconfié de tus CTA (porque no llevan a lo que dicen ser) y, por ende, acabe dándose de baja de tu newsletter.
