En muchos de nuestros artículos, como ya sabrás, hablamos de la importancia de definir una buena estrategia de Email Marketing en las empresas. En ocasiones, incluso, hemos hablado de las tendencias de emailing que se avecinan para este nuevo año, de cara a que puedas sacar partido en la nueva estrategia que te encamines a definir. Pero, de nada serviría contar con una buena estrategia de Email Marketing, sin tener en cuenta que un mal Email Deliverability echaría por tierra todo nuestro esfuerzo.
¿Qué es el Email Deliverability?
Podemos definir el Email Deliverability como la tasa de entrega de Email Marketing, que dicho en otras palabras, sería un indicador empleado para contabilizar la cantidad de mensajes de correo electrónico que se envían durante una campaña de Email Marketing y que, efectivamente, llegan a la bandeja de entrada de las cuentas de correo electrónicos seleccionadas, sin irse a spam o a cualquier otra carpeta de correo no deseado. Y, es que, normalmente, al efectuar envíos masivos de correos electrónicos, existe un alto porcentaje de mensajes que no llegan a su destino, tal y como estaba planeado, ya sea por motivos que van desde medidas de seguridad antispam o simplemente rebotes de correos.
El hecho de que llegue a un tipo de destino u otro es algo que puede variar en función de diferentes factores, pero, por lo general, suelen ser los 3 siguientes los que determinan el Email Deliverability: reputación del remitente (determinado por el proveedor de servicios de Internet (ISP), en base a diversos factores), contenido del mensaje (eliminando cualquier tipo de contenido que presente una ética dudosa o que, por ejemplo, esté repleto de enlaces sin contexto alguno) e identificación.
Por tanto, contemplando los factores anteriores, podemos plantear estrategias de Email Marketing que tengan en cuenta esta tasa de Deliverability, buscando conseguir una mejora de calidad en el contenido, así como una identificación y reputación exitosas. De esta manera, abordando el Email Marketing desde la calidad, enviando siempre nuestros mensajes a una lista de suscriptores que nos han dado voluntaria y previamente su consentimiento, y con un contenido interesante, podremos obtener un Deliverability positivo.
En este artículo, además, venimos a presentarte las nuevas tendencias de Deliverability que llegan pisando fuerte en este nuevo año. Si tienes en cuenta todos los puntos y consideraciones anteriores, y, además, aplicas las nuevas tendencias… ¡verás que tu estrategia de Email Marketing dará unos resultados exitosos!
Tendencias de Deliverability para 2019
Mantener la reputación de los correos alta
Por muy obvio que pueda parecer, es muy importante que la reputación que, poco a poco, vas labrando de tu marca sea la mejor posible. Por tanto, más que ser una tendencia de 2019, esto es algo que debe mantenerse en tendencia en este 2019. Y, ¿cómo?
- Mantén tu tasa de rebote en niveles bajos: auditando periódicamente tus bases de datos de contactos para evitar, en la máxima medida de lo posible, que existan correos que no se entreguen.
- Hazte con un formato y codificación de correos electrónicos que no induzca a cualquier tipo de duda o ética no clara.
- Envía contenidos de calidad, que el usuario no tenga la necesidad de tachar como correo no deseado o spam.
- Ponle fácil la cancelación de la suscripción. Si quieres evitar que un usuario envíe directamente tu correo sin ni siquiera dedicarle un segundo a su bandeja de correo no deseado: ponle fácil la baja a tus envíos. Al enviar correos electrónicos no solicitados a una lista de suscriptores, entras directamente en unas altas posibilidades de fallar en tu comercialización: estarás creando una experiencia de compra negativa, incluso antes de empezarla.
Ser periódico y coherente en los envíos
Cuanto más constantes sean tus envíos de correos electrónicos, mejor.
El Email Marketing, en realidad, funciona igual que cualquier tipo de relación con una persona: si los primeros meses de relación le bombardeas a llamadas telefónicas a diario y, de repente, dejas de contactarle durante mucho tiempo, cuando retomes la relación ésta habrá cambiado mucho. En el caso del Email Marketing sucede lo mismo: si has optado inicialmente por enviar los correos electrónicos una vez por semana, mantenlo de manera constante durante todo el periodo en que dure tu estrategia.
De esta manera, además de que aumentarás tu reputación frente a los ISP (proveedores de servicios de Internet), también mantendrás la rutina en tus usuarios sobre cuándo recibirán un contenido de calidad y crearás una relación real y duradera en el tiempo. Por lo que, de cara a este nuevo año, busca una coherencia mucho más estratégica en tus envíos.
Contar con una dirección IP segura y dedicada a los envíos
Si, hasta el momento, no te preocupaba desde que dirección IP mandabas tus emails, esta tendencia deberás seguirla mucho más estrictamente desde ahora. Porque, desde el momento en que compartes una dirección IP con otros remitentes, normalmente existe una relación de ésta sobre la capacidad de entrega, ya que los ISP juzgan tu IP en función de las diferentes métricas que consideren más oportunas. De esta manera, es mucho más recomendable que siempre se envíen los correos electrónicos desde la misma dirección de IP, generando una mayor reputación y confianza por parte de los proveedores de servicios.
Conocer a la audiencia mucho más a la perfección
Conociendo en profundidad a tu audiencia (basándote en datos de calidad, con estudios que rastreen el comportamiento de tus clientes, por ejemplo), lograrás enviar contenido de calidad a las personas que, efectivamente, consideren esos envíos como relevantes: y, es que, no todos los usuarios se sienten atraídos por los mismos contenidos.
De esta manera, conociendo en profundidad los intereses y necesidades de tus usuarios (mucho más de lo que les conocían en 2018), lograrás evitar que tus contenidos sean marcados como correo no deseado.
Además, es muy importante que los destinatarios no sientan que se les está comercializando algo, y mucho menos sentir que se les está mandando un correo electrónico sin ningún tipo de puntualización hacia él mismo como persona (es decir, sin personalización).
Es mucho más recomendable que crees una experiencia digital que gire en torno a tu email, hablando a tu usuario de aspectos personales y necesidades propias que finalmente solventen a través de tus productos y/o servicios, antes que lanzar de manera general una oferta comercial.
Por otro lado, también es necesario que elijas la hora indicada para enviar tu email, y eso únicamente podrás conocerlo estudiando el comportamiento de tu usuario: ¿es un cliente B2C, que puede revisar su correo en el trayecto de ida hacia el trabajo? ¿O es B2B, y te interesa más tu producto para su negocio y, por tanto, debes impactarle a una hora en la que esté sentados en su lugar de trabajo? Recuerda que tu email solamente vivirá una media de 2 segundos en la bandeja de entrada de tu usuario, desde que lo vea hasta que decida qué hacer con él, por tanto: estudiar y analizar muy bien el flujo de actuación es algo que se potenciará altamente en este año.
Verificar las bases de datos de correos electrónicos y limpiar con frecuencia las listas
Para evitar las altas tasas de rebote, como decíamos algunas líneas arriba, es necesario que la limpieza de datos sea algo constante e integrado dentro de tu estrategia, y de cara a este nuevo año 2019 (con la nueva LOPD vigente, más aún). Además, una vez que tengas limpias las bases de datos, deberás realizar una verificación de ID para confirmar que tu usuario es quien dice ser.
Por tanto, con estas tendencias anteriores que te recomendamos llevar a cabo, añadido a algo tan básico como evitar las palabras “prohibidas”, no olvidar las normal básicas y ayudarte de herramientas de Email Marketing adecuada, lograrás unos grandes resultados en tu estrategia de 2019.